Me despidieran de un trabajo en el que sufrí maltrato y entré en una crisis profunda. Aunque llevaba años tratándome con un psicólogo, con un psiquiatra me mandaban tratamientos, pero mis problemas seguían ahí. Eso me motivó profundamente a buscar caminos y salidas alternativas, y fue por ahí por dónde entré en las terapias holísticas/alternativas, entre ellas las Constelaciones Familiares, hará unos 13 años atrás y ahí apareció en mi vida Marcela Parolin, consteladora familiar con quien me acerqué a la herramienta y estudio.
Tuve un destino difícil, muy duro: abandono desde los 2 meses hasta los 6 años en una guardería, maltrato (por parte de mi madre y mi padre), abusos, violaciones. Mi padre maltrató profundamente a mi madre, a mi hermano y a mi. Mi madre era alcohólica de a ratos…

A los 17 casi muero ya que intenté suicidarme tomando un veneno y entré en coma en 30 minutos… la muerte me era familiar, la tuve en la nuca muchas veces, pero me he salvado milagrosamente… que esté viva es otro milagro, mamá abortó muchas veces, pero yo tuve que nacer, por alguna razón…

Emigré finalmente para romper con todo esto, ilusa de mí, pensaba que las cosas cambiarían, pero no, las llevé conmigo y las pasé a mis hijos…

Empecé a constelar y poco a poco sentí mejoría, cómo que la «carga» invisible se aligeraba, la culpa desaparecía, las cosas se colocaban, todos ocupaban su lugar, el frío que sentía siempre, desapareció, tras dos años de constelar. Luego de esos primeros dos años constelando la relación con mi padre culminó con una conversación muy sincera y un asentimiento mutuo a todo lo que pasó que nos llevó a los dos a un salto cuántico.

Empecé a sentirme más animada; la relación con mi madre (fría y distante) mejoró exponencialmente hace un par de años, empezó a decirme que me quería a los 52 y tengo 54, ahora nos hablamos con cariño y respeto y es un milagro que estemos tan bien, tras todo lo que hemos pasado todos los miembros de la familia.

Me falta el tema económico y laboral por solucionar, parece que se resiste bastante, no doy con las «teclas»  pero me rendí a todo cómo es, porque parece que no puedo ganarme la vida sola, consigo empleos y los pierdo, ocurren cosas inexplicables… cada cierto tiempo me quedo sin trabajo- es el caso- sin ingresos, sin sustento, no sé es raro de narices, me agobia a ratos, pero no, no logré solucionar este tema, así que sigo, y seguiré constelando,  las profeso profundo respeto y siento profundamente los trabajos y los cambios que surgen ipso facto tras las constelaciones. Es indescriptible y real, no me lo invento.

Mi vida ha cambiado radicalmente para mejor.

Llevo algo más de 4 años constelando y estudiando para ser consteladora. Cuando tengo oportunidad participo de talleres grupales y sigo constelando.

Hondo abrazo y quiero que les conste mi más profundo respeto por su enorme aportación, entrega y trabajo a las constelaciones.

AI